Tener un entrenador personal ofrece una guía clave para alcanzar objetivos físicos de forma segura y efectiva. Desde perder peso hasta ganar masa muscular o mejorar el rendimiento, su supervisión adapta la actividad física a tus necesidades, optimizando los resultados y fomentando un estilo de vida activo.
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Publicado diciembre 2024
María, Socia del Club MAPFRE, tiene 35 años y está convencida de la importancia de realizar actividad física de forma habitual para mantener un buen estado de salud, por lo que se está planteando comenzar a practicar algún deporte. No tiene claro qué disciplina deportiva o tipo de actividad física sería más adecuada para ella, ni si necesita contar con la ayuda de un entrenador personal. Aprovechando que pertenece al Plan de Fidelización de MAPFRE desde hace tiempo, ha decidido contactar con nuestro Asesor en Bienestar especialista en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte y Medicina Deportiva para consultarle sobre la conveniencia de contar con un preparador físico.
El Asesor le explica que un entrenador personal puede suponer un gran incentivo en cuanto a la motivación, la planificación de la actividad física más adecuada en función de los objetivos, así como de la prevención de lesiones en el deportista. Además, el Asesor le habla de otros beneficios de tener un entrenador personal a la hora de practicar deporte.
- ¿Qué hace?
- Beneficios
- ¿Por qué?
Qué hace un entrenador personal
Un entrenador personal es un profesional especializado en fitness y salud que es capaz de diseñar un programa de entrenamiento totalmente adaptado a las necesidades, metas y capacidades individuales de cada persona. La personalización es un elemento fundamental que tiene en cuenta elementos como el nivel de condición física inicial, el historial de salud y lesiones, la disponibilidad de tiempo, los objetivos, etc.
De este modo, los programas de ejercicio personalizados, guiados por entrenadores con formación homologada, pueden optimizar el rendimiento y reducir el riesgo de lesiones en comparación con rutinas genéricas, ya que se ajustan específicamente a las condiciones del individuo. Además, un programa personalizado permite avanzar de forma progresiva, lo cual ayuda a alcanzar las metas establecidas de forma realista y sostenible en el tiempo.
Otro elemento clave para el éxito y la seguridad en cualquier tipo actividad física es la técnica. El entrenador puede corregir la ejecución de los ejercicios en tiempo real, previniendo errores comunes que pueden conducir a la aparición de lesiones y sobreesfuerzos. Algunas investigaciones cuantifican que la supervisión de un entrenador reduce la incidencia de lesiones deportivas a la mitad, especialmente en actividades como levantamiento de pesas y ejercicios de alta intensidad. Esto es particularmente importante para deportistas principiantes, ya que, sin una técnica adecuada, actividades aparentemente simples pueden conllevar un riesgo de lesión elevado.
Por otro lado, los entrenadores personales titulados suelen aplicar conocimientos basados en la evidencia científica más actualizada a la hora de diseñar programas de entrenamiento. En un campo en constante evolución, un buen entrenador se mantiene al día con respecto a las novedades y la investigación reciente, y adapta sus métodos en función de los nuevos hallazgos científicos. Esto garantiza que los deportistas se beneficien de estrategias eficaces en términos de rendimiento, recuperación y prevención de lesiones. Un ejemplo de ello puede ser la periodización de la actividad física, incluyendo la planificación estructurada de las cargas de trabajo y descansos, cada vez más presente en los programas de entrenamiento personalizados. Todo ello contribuye a ganar masa muscular y a mejorar el desarrollo de la fuerza, la resistencia y otros atributos físicos de manera óptima.
Otros beneficios de tener un entrenador personal
La repetición constante de los mismos ejercicios y la falta de variedad pueden reducir la efectividad del entrenamiento, además de llevar hasta el aburrimiento. Es bueno tener un entrenador personal porque suele introducir periódicamente nuevos ejercicios y métodos de entrenamiento, manteniendo las sesiones dinámicas y motivadoras.
En este sentido, variar las rutinas y métodos de entrenamiento estimula el desarrollo de nuevas adaptaciones musculares y metabólicas, lo que optimiza el rendimiento y facilita la progresión en el tiempo. La introducción de ejercicios nuevos y específicos también contribuye a evitar el sobreentrenamiento y a asegurar un equilibrio adecuado entre descanso y actividad.
Por otro lado, la motivación es uno de los factores más determinantes en la continuidad de una rutina de ejercicios. Tener un entrenador personal ofrece una fuente constante de apoyo y motivación, lo cual ayuda a mantener el compromiso a largo plazo. El acompañamiento por parte de un profesional de la actividad física y el fitness mejora la adherencia a los programas de ejercicio según señalan diversas investigaciones.
Finalmente, un preparador físico puede ayudar a establecer objetivos realistas y medibles que se puede revisar regularmente. En este sentido, la medición del progreso es esencial para mantener la motivación y evaluar el éxito del programa de entrenamiento. El entrenador utiliza herramientas y métodos para registrar la evolución del deportista, desde las mejoras en la condición física hasta los cambios en la composición corporal y el rendimiento. Los datos recopilados permiten al entrenador personal adaptar el programa de manera precisa y progresiva, lo cual maximiza los resultados y reduce el riesgo de retroceso y sobrecarga. Este elemento es particularmente relevante cuando existen metas específicas, como competiciones deportivas a la vista o la rehabilitación después de una lesión.
Por qué buscar entrenador personal
Los entrenadores personales no solo enseñan habilidades físicas, sino que también proporcionan apoyo emocional al deportista, promoviendo la autoconfianza y una mentalidad positiva. De este modo, diversos estudios han asociado el ejercicio supervisado con una reducción significativa en los niveles de estrés y ansiedad, que puede producirse en el deportista en determinadas circunstancias.
Por otro lado, otro de los objetivos principales de buscar entrenador personal es porque son capaces de educarnos para que desarrollemos una relación saludable con la actividad física y con las disciplinas relacionadas, incluyendo la nutrición deportiva o los suplementos ergogénicos. Esto puede contribuir además a mantener un estilo de vida activo y saludable en el futuro, incluso después de terminar con la etapa de entrenamiento monitorizado.
María queda muy contenta con toda la información que le ha proporcionado el Asesor en Bienestar del Club MAPFRE sobre los beneficios de tener un entrenador personal, por lo que volverá a utilizar esta ventaja siempre que tenga alguna duda y pedirá cita con un especialista de ser necesario.
César Miranda
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