Reforma de las pensiones 2023

¿En qué consiste la reforma de las pensiones 2023?

Recientemente se ha publicado, la segunda gran reforma sobre las pensiones públicas, tras la aprobada el 29 de diciembre de 2021 según la Ley 21/2021 de 28 de diciembre, que supuso el establecimiento de la revalorización de las pensiones. Esta reforma garantizaba el poder adquisitivo gracias a la actualización de las pensiones según la inflación del ejercicio anterior y, por otro lado, supuso la modificación de los coeficientes reductores (que en la práctica penalizaban las jubilaciones anticipadas voluntarias e involuntarias), y promovía las jubilaciones ordinarias y el tener el mayor número de cotizaciones en la vida laboral.

Después de más de un año de la citada reforma, el gobierno ha llevado a cabo una nueva reforma sobre las pensiones públicas, mediante la promulgación del Real Decreto-Ley 2/2023 de medidas urgentes para la ampliación de derechos de los pensionistas, la reducción de la brecha de género y el establecimiento de un nuevo marco de sostenibilidad del sistema público de pensiones. Esta nueva norma redactada teniendo en cuenta las recomendaciones del Pacto de Toledo, se publicó en el BOE del 17 de marzo y ha sido convalidado por el congreso de los Diputados con 179 votos a favor.

• En primer lugar, determina el incremento gradual de la base máxima de cotización, homologándolo a su nivel en los estándares europeos (tal y como establece el preámbulo de la norma), con el fin de aumentar la parte del salario sujeta a cotización a la seguridad social y, por lo tanto, supone un mayor ingreso recaudatorio.
• En segundo lugar, este real decreto establece lo que se denomina “Cotización adicional de Solidaridad”, que supone un mayor gravamen de forma gradual de los salarios que superen las bases máximas de cotización. De modo que se establecen tres tramos de rendimientos, a los que corresponde un tipo de cotización progresivo. Conforme a la disposición transitoria cuadragésima segunda, la cotización adicional de solidaridad se incrementará desde el año 2025 hasta alcanzar en 2045 el tipo definitivo.
• Por otro lado, se aplica el denominado “Mecanismo de Equidad Intergeneracional” (MEI), que ya estaba recogido en la Ley 21/2021 de 28 de diciembre, y que supone que entre el año 2024 y el 2029 aumentará una décima cada año hasta alcanzar 1,2 puntos porcentuales (lo que implica la supresión del factor de sostenibilidad establecido en la reforma que hubo en el 2023).
• Asimismo, se ha tenido en cuenta la situación de muchas personas que, debido a la precariedad laboral y la inestabilidad habida los últimos años, han tenido cotizaciones irregulares. También a las mujeres que han tenido grandes lagunas de cotización al haberse dedicado al cuidado de los hijos. En ambos casos se da la posibilidad de dar una doble alternativa para calcular su pensión de jubilación, pudiéndose descartar las peores veinticuatro mensualidades de cotización dentro del período de veintinueve años o bien acogerse a los últimos veinticinco años si la base reguladora de la pensión resultante fuera más beneficiosa.En la práctica esto supone que el período para tener en cuenta para el cálculo de la base reguladora de la pensión de jubilación, serán por lo tanto los 29 años anteriores a la fecha de jubilación; si bien de oficio el INSS seleccionará los 324 meses (27 años) de bases de cotización, de mayor importe de todo el período o bien se podrá elegir los últimos 25 años anteriores.

Por otro lado, se adecúa el concepto del complemento de brecha de género, para que los hombres puedan intentar solicitarlo. No obstante, a diferencia de las mujeres, para poder cobrarlo los hombres deben reunir los siguientes requisitos:

a) Tener reconocida una pensión de viudedad por el fallecimiento del otro progenitor de los hijos o hijas en común, siempre que alguno de ellos tenga derecho a percibir una pensión de orfandad.

b) Causar una pensión contributiva de jubilación o incapacidad permanente y haber interrumpido o haber visto afectada su carrera profesional con ocasión del nacimiento o adopción, con arreglo a determinadas circunstancias.

La reforma de las pensiones 2023 también incluye que el agotamiento del plazo de 365 días sin emisión de alta médica suponga el pase automático a la prórroga de incapacidad temporal, sin necesidad de declaración expresa, con lo que se simplifica y clarifica la gestión. Si no hubiera prórroga, se mantiene como hasta el momento el procedimiento de disconformidad cuando el alta médica por curación, mejoría o incomparecencia al reconocimiento médico se emite al agotarse los 365 días.

Además, se determina el mantenimiento de la colaboración obligatoria en el pago de la prestación durante la prórroga de la incapacidad temporal hasta el alta médica del trabajador por curación, mejoría o incomparecencia, hasta el último día del mes en que el Instituto Nacional de la Seguridad Social emita el alta médica por propuesta de incapacidad permanente, o hasta el cumplimiento de los 545 días, finalizando en todo caso en esta fecha. También se recoge la obligación de las empresas colaboradoras voluntarias de pagar a su cargo la prestación de incapacidad temporal hasta la extinción del derecho al subsidio, incluida en su caso, la situación de prolongación de efectos económicos.

Por último, se regula la integración de períodos sin obligación de cotizar para los trabajadores autónomos, que se extiende a los seis meses siguientes a cada situación de cese de actividad y se cubre con la base mínima de la tabla general del este Régimen Especial de la Seguridad Social de los Trabajadores por Cuenta Propia o Autónomos.